Recursos fiables para tu maternidad

Recursos fiables para tu maternidad

A pesar de venir de una generación que estudió sin internet, buscó piso a través de los anuncios de prensa, y con un sólo teléfono fijo en casa, que para más inri, estaba en mitad del salón, en cuanto supe que estaba embarazada, lo primero que hice fue correr a google a buscar información. Me sorprendió poder encontrar tanta cantidad de información a golpe de click, disponible en cualquier momento, y además, gratis. La búsqueda de recursos fiables para mi maternidad resultó una necesidad.

Mis lecturas de cabecera eran principalmente foros de embarazadas, blogs personales, artículos de revistas de puericultura y alguna aplicación que me descargué en el móvil. ¡Todo de fiar, vaya!

No tardé en darme cuenta de que Google da voz (y ranking) a cualquiera con una opinión o comentario, aunque éste no tenga veracidad alguna o fundamento científico, y del peligro que eso conlleva.

Aprendí a desechar mucho contenido, a desarrollar poco a poco mi criterio y a seleccionar fuentes verdaderamente fiables, contrastadas. Me centré en comparar diferentes puntos de vista, en preguntar, asesorarme y leer fuera de la red.

 

Internet es una herramienta poderosa, pero hay que saber manejarla adecuadamente para que nos resulte de utilidad.

Por esta razón, he elaborado mi propia selección de fuentes y recursos útiles, interesantes y fiables (y gratis) para la maternidad que me gustaría compartir con vosotros:

 Recursos fiables para tu maternidad

· El parto es nuestro

Si estás embarazada y andas buscando información para lograr el parto que deseas, esta web es parada indispensable.

La Asociación El Parto es Nuestro, está formada por usuarias/os y profesionales de la salud, y su objetivo es lograr mejorar las condiciones y atención del embarazo, parto y posparto tanto para las madres y los hijos, abogando por un trato más humano y respetuoso, respetando las indicaciones de la OMS.

Toda la información de la web está dividida por temas (incluyendo un área legal y un rincón de relatos), perfectamente estructurada y sencilla de encontrar.
Leer artículos completísimos, con bibliografía adjunta, y con enlaces a estudios científicos resulta una maravilla.

Encontrarás también un apartado de agenda, ya que EPEN dispone de una amplia red de grupos locales de apoyo que organiza reuniones y encuentros libres.

· Uma manita

La pérdida del bebé que se espera es un suceso perturbador y, por desgracia, no siempre recibe la atención o el respeto que se merece. En esta web podrás encontrar información sobre qué es el duelo, sus fases, la necesidad de pedir ayuda, apoyo . Información sobre procesos hospitalarios, tanto para la pareja como para familiares y amigos.
Así mismo, la web dispone de un apartado específico sobre trámites y gestiones que aún está en desarrollo.

 

· Alba Lactancia Materna

Posturas para amamantar, crisis de crecimiento o lactancia durante el embarazo son sólo una muestra de la gran variedad de artículos que esta web alberga.

Conducida por Asesoras de Lactancia, la página de esta asociación ofrece información y apoyo a aquellas madres decididas a amamantar a sus hijos.

Los artículos se engloban en siete temas principales, y la información se revisa, actualiza y amplía periódicamente. Además, la web dispone de un área para enviar tus consultas personales o acceder a un grupo privado de facebook con la misma finalidad.

· E-lactancia

Amamantar y tomar algún medicamento es posible. Como reza en su web, la lactancia materna es el fenómeno más saludable para bebés y madres, y muy pocas situaciones justifican contraindicarla. Por eso, si estás dando el pecho y debes medicarte, antes de pensar en el destete, echa un vistazo a esta página.

Recientemente renovada, se ha convertido en un referente en este campo tanto para madres que amamantan como para profesionales de la salud. En ella podrás consultar la compatibilidad de la lactancia materna con una extensísima lista de productos, que va desde fármacos, cosméticos, productos de fitoterapia, homeopatía, o procedimientos médicos.

Tan sólo tienes que introducir el nombre del producto en el buscador y te aparecerá el nivel de riesgo que supone para la lactancia (riesgo muy bajo, bajo, alto o muy alto). Además, para que resulte más intuitivo, existe un código de color, de verde a rojo, similar al del semáforo.

Cada producto tiene asociado un comentario y desde e-lactancia se ofrecen las alternativas disponibles con sus correspondientes niveles de riesgo.

 

e-lactancia.org, recursos fiables maternidad

 

· Red Canguro

La web de esta Asociación, pionera en fomentar el uso de los portabebés ergonómicos en nuestro país es una recopilación fabulosa de artículos indispensables para ir adentrándote en el porteo. En su apartado «Por dónde empezar» encontrarás desde explicaciones sobre cómo llevar a nuestros bebés correctamente, comparativas entre diferentes portabebés, guías de compra de fulares, o folletos para descargar e imprimir.

Su sección de vídeos te pondrá sobre la pista de cómo usar diferentes portabebés. Y ahora también disponen de un grupo cerrado de facebook para resolver dudas, compartir experiencias y seguir promoviendo el porteo ergonómico.

 

· De Monitos y Risas

Tanto si aún no tienes claro que quieras portear, como si ya lo haces y quieres aprender algo más, este cuidado canal de youtube es un imprencindible.

Gracias a las detalladas explicaciones, podrás aprender a realizar nudos básicos, a pasar a tu bebé a la espalda, trucos para hacerte el porteo más fácil, o enfrentarte a nuevos retos. Con una lista de reproducción bien estructurada y más de 340000 visitas, este canal no debería faltar de tu barra de favoritos.

 

·Dormir sin llorar

El sueño (el no-sueño, mejor dicho) de nuestro bebé es algo que nos suele inquietar bastante a los padres. Las noches en vela, el cansancio y la idea preconcebida de cuánto debe dormir nuestro bebé nos convierte en presa fácil de cualquier método que asegure que nuestro hijo dormirá como un angelito.

Este portal te ayudará a comprender cómo es y evoluciona el sueño de tu hijo, a mejorar tus noches y buscar soluciones respetuosas, sin emplear métodos conductistas que ignoran el llanto y el malestar del bebé.
Así, encontraremos artículos sobre la importancia de las siestas, los terrores nocturnos y las pesadillas, o cómo poner en práctica el plan padre. Todo ello explicado de manera sencilla y minuciosa.

 

· Una maternidad diferente

El apartado sobre baby-led weaning o alimentación complementaria a demanda de este blog es digno de incluir en esta selección.
Eloísa hace una recopilación fantástica de reseñas sobre el tema, tanto en inglés como en español, narra su experiencia y el resultado de su investigación.

Encontrarás un resumen general sobre cómo aplicar el blw (texto traducido de Gill Rapley, autora del famoso libro El niño ya come solo), una guía práctica sobre el método , ejemplos de comidas, una lista de errores comunes, e incluso una selección de consultas con sus correspondientes soluciones.

Aunque cada vez es más sencillo encontrar información sobre el tema, aún no he encontrado un lugar más completo que éste.

Evidentemente, en esta lista no está todos los recursos disponibles, y me habré dejado muchos en el tintero. ¿Has echado alguno en falta? ¿Cuáles son tus favoritos? Paciencia, que esto no ha hecho más que empezar, y ya volveré por aquí con más.

Diabetes gestacional: mi experiencia

Diabetes gestacional: mi experiencia

¿Qué es la diabetes gestacional?

La diabetes gestacional es una hiperglucemia que padecen algunas embarazadas. Un nivel más alto de lo establecido de glucosa en la sangre.

La diabetes gestacional (no hablo de la diabetes tipo I y II)  controlada en el embarazo, no revierte mayor gravedad y en la mayoría de los casos remite tras el parto.

Aunque en mi primer embarazo no fui “etiquetada” con diabetes gestacional, si lo he sido en mi segundo embarazo. La curva corta o prueba de O’Sullivan salió ligeramente por encima de lo fijado. Y lo mismo sucedió con los dos últimos valores (se toman cuatro) de la curva larga.

En mi caso, por los valores dados, en principio se podía controlar mediante dieta. El cuerpo es sabio, sólo tenemos que prestarle atención. Al contrario que en mi anterior embarazo no me apetecían cosas dulces. Apenas gané peso en los primeros seis meses debido a las nauseas que no me abandonaron en todo el embarazo.

La dieta que comencé a seguir era la misma, más o menos, que llevaba hasta entonces. Una dieta sana que no sólo las embarazadas, sino todo el mundo, deberíamos seguir. Variada, sin abusar de los azúcares añadidos, y donde las frutas y verduras tengan su merecida presencia. Sin olvidarnos del ejercicio moderado, que puede ser simplemente caminar un rato cada día. El realizar alguna actividad 15 minutos tras las comidas ayuda a controlar la hiperglucemia.

 

Decía antes, que en principio se podía controlar mediante dieta.  Cada día llevaba a cabo dos mediciones en una comida principal, justo antes de comer y dos horas tras la comida. Y a pesar de que las mediciones estaban en la mayoría de los casos dentro de los límites, no dejaban de repetirme en cada visita que ya veríamos si no me hacía falta insulina con el tiempo.

¿A dónde quiero ir a parar? Pues que para mí, y estoy segura que para muchas embarazadas en el mismo caso, era una situación muy estresante. La posibilidad de necesitar insulina añadido al augurio (por parte del ginecólogo y el endocrino) de posibles complicaciones, me añadía una ansiedad que ni quería ni necesitaba en mi estado.

En vez de cuidar el estado emocional de la embarazada pareciera que su intención fuese la de infundir miedo. Esto ocasiona estrés, ansiedad y miedo al parto y a lo que le pueda pasar al bebé. El llamado efecto nocebo. ¿Con qué fin? Llevarnos a su terreno y que traguemos con todo lo que nos manden sin rechistar. Porque están acostumbrados a intervenir.

 

Una cosa es informar objetivamente y llevar unos controles, y otra augurar supuestos acontecimientos, siempre basándose en lo peor. A mi me gusta partir de la base de que las cosas no tienen por qué ir mal. Que no quita conocer las alternativas en el caso de que resulte necesario.

Los profesionales con los que traté, hasta casi el final de mi embarazo, deberían tener en cuenta que las embarazadas “diagnosticadas” de diabetes gestacional no estamos enfermas ni destinadas a tener un bebé enorme. Tampoco necesitamos ayuda para parir.

 

curva azúcar

 

En mi experiencia con la diabetes gestacional hay cosas que no me parecen normales:

 

  • Perder peso por realizar una dieta para controlar los niveles de azúcar en sangre.

 

En todo el embarazo sólo gané un kilo. La dieta para una embarazada tiene que estar basada en controlar los alimentos hiperglucémicos y no estar basada en calorías.

 

  • Pasar hambre con el riesgo de sufrir una hipoglucemia.

 

En alguna ocasión pasé un poco de hambre, porque tenía que medirme en la siguiente comida pero aún quedaba una hora. Y sabía que si comía algo en ese momento, el valor que daría superaría el mínimo. Esto cuando la recomendación es que una embarazada coma a menudo pocas cantidades, sobre todo cuando se padece de náuseas.

  • La obsesión de que nazca un bebé grande.

 

Aunque el peso de mi primera hija fue prácticamente el mismo al de la segunda, en la misma semana de gestación, en este embarazo me intentaron meter miedo con lo grande que era. Esto cuando en mi primer embarazo no me comentaron nada del peso en ningún momento. Claro que no había diabetes gestacional. A mi no me daba miedo parir un bebé grande.

 

  • La omisión de información.

 

No se nos informó del protocolo, por diabetes gestacional, que se seguiría durante el parto para mí y tras el parto para mi pequeña. Sólo cuando pregunté se limitaron a hacer comentarios muy por encima. Esto me parece faltar al derecho a la información y al consentimiento informado.

 

Tampoco se nos informó del margen error del 10% al estimar el peso de nuestro bebé. Simplemente se limitaron a alarmarnos porque (según el ginecólogo) estaba en un percentil 95. Sin embargo, otro ginecólogo no sólo vio estupendas mis mediciones de glucosa sino que no encontró que mi bebé fuese grande. Por suerte hay profesionales haciendo bien su trabajo.

 

  • No contar con nuestro consentimiento.

 

Fue el endocrino, y no el ginecólogo, el que me dijo que en los monitores de la semana 38 seguramente me dejarían ya allí. Como si yo fuese un títere y no tuviese capacidad de elección.

 

 

 

Todas estas cosas me indignan y me hacen desconfiar de algunos profesionales. A pesar de mis conocimientos y mi confianza para parir, me llegué a sentir insegura, estresada y triste. Gracias a que tenía las cosas claras y que el cambio de hospital lo tenía también claro desde el principio, todo salió perfecto.

Mi pequeña nació en un parto maravilloso y respetado, que puedes leer aquí, con 3.450 Kg. Y sin ningún problema de hipoglucemia, con el que también pretendieron asustarnos. Decir que mamó a demanda e hicimos piel con piel nada más nacer.

 

La diabetes gestacional controlada en el embarazo no equivale a un parto inducido sí o sí,  ni a cesárea, ni a un bebé macrosómico o con hipoglucemias tras el parto.

 

En plena cesárea te pasa esto y no te lo puedes ni creer

En plena cesárea te pasa esto y no te lo puedes ni creer

Hoy os vengo a contar una historia personal. Una experiencia vivida durante uno de los sucesos vitales de mi vida: el nacimiento de mi segundo hijo. Y que acaba con moraleja en plena cesárea.

Mi primera hija nació por cesárea, totalmente innecesaria y esa experiencia vital en mi vida hizo que buscase tener un parto natural en mi segundo embarazo.

Leí, me formé, me preparé, iba a yoga prenatal, seguí bailando y ejercitándome, vigilé que mi cicatriz estuviese bien, que no hubiera adherencias, y llevé un control de mi dieta y de todo lo que me había informado. Estaba empeñada y decidida a que esta vez lo iba a lograr.

Una mañana (estaba ya de 37 semanas) me levanté con una pierna hinchada, algo que es normal en el embarazo y más hacia el final. Lo que no era normal es que si me pasabas suavemente un dedo, sin presionar, me dolía y mucho. A las 24 horas mi pierna era el doble, no me cabía ni los pantalones especiales del embarazo. Fui a mi ginecóloga y al verme la pierna me mandó a urgencias por si se trataba de una infección bacteriana. Pero no me dijo que implicaba si ese diagnóstico se hacía realidad.

Después de un calvario por urgencias y por diferentes servicios, hasta 24 horas después de haber entrado en urgencias no obtuve un diagnóstico. Efectivamente tenía una infección: una celulitis infecciosa.

Celulitis Infecciosa

 

No tenía ni idea de que era eso y por qué de repente había que hacerme sí o sí una cesárea de urgencias. Yo estaba destrozada, otra cesárea y no entendía por qué. Vino un ginecólogo amigo de mi familia, que me explicó en qué consistía la infección y porqué era tan peligrosa:

«La infección está muy avanzada y avanza muy rápido, corres el riesgo de hacer una sepsis y morir los dos»

Realmente yo me encontraba tan mal que si que temí por nuestras vidas y entonces asumí que mi situación era realmente para una cesárea, esta vez sí, justificada.

Me preparé psicológicamente lo más rápido que pude para el momento, y cuál fue mi sorpresa que al llegar a observación antes de entrar a quirófano estaba una de mis amigas monitorizada. Un momentazo y un desahogo con una buena amiga, con la que me tranquilicé y entré un poco mejor al quirófano.

Aun así no podía dejar de temblar, una mezcla de miedo, dolor en la pierna y el frío que hacia en el quirófano. Mientras me ponían la epidural y me pedían que me estuviese quieta, con el añadido de que llevo tatuada la espalda y el anestesista me reñía por ello, me puse a llorar.

Pero conforme me tumbé empecé a aplicar mis estrategias de relajación y conseguí abstraerme (más o menos porque el anestesista se empeñaba en que me debía de quitar con láser el tatuaje cuando me recuperase…).

Y llegó el momento en el que sacaron a mi pequeño y me incorporaron para verle. No me lo pusieron encima pero lo pusieron en una cuna donde yo lo veía mientras lo revisaban. Y yo lloraba, no podía parar. Me lo pusieron a los pocos minutos pegadito a la cara y mientras yo estaba en mi mundo con mi bebé ahí pegado sucedió algo que me dejó fuera de juego.

Y en plena cesárea, aún con abdomen abierto después de sacar la placenta, cuando la ginecóloga me dice:

«Uy, se te ha olvidado firmar el consentimiento para la ligadura de trompas»

¿QUEEEEE?

¿Qué ligadura de trompas? ¡Yo no quiero que me toquéis nada!

No daba crédito. Como ya tenía una cesárea anterior habían decidido que yo ya no debía de tener más hijo.

Moraleja

Leed bien todo lo que os den a firmar antes de entrar en un quirófano porque igual te encuentras con que ellos han decidido por ti
y tú has dado tu consentimiento sin darte cuenta.

¿Te gustas embarazada?

¿Te gustas embarazada?

 

El embarazo de toda mujer debería ser vivido con alegría y disfrutando de cada momento. Cuando comenzamos a sentir a nuestro bebé es lo más maravilloso del mundo. Nuestro cuerpo cambia y es hermoso. Nuestra sensibilidad aumenta y nuestros sentimientos pueden ser cambiantes. Incluso nuestra libido se ve afectada.

 

 

Creo que todas las que hemos estado embarazadas estaremos de acuerdo en que sentir a nuestro bebé dentro es una de las cosas más grandiosas que existen en este mundo. Es uno de los regalos del embarazo.

 

Sin embargo no siempre el embarazo se vive con tranquilidad y/o alegría. Pueden surgir molestias que no nos dejen disfrutar todo lo que querríamos: nauseas, vómitos, ardores, mucho cansancio… O que durante el embarazo se detecte alguna anomalía grave que lógicamente nos haga vivirlo con miedo y ansiedad.

 

En este último caso resulta difícil vivir el embarazo con tranquilidad y disfrutando de los cambios que experimentamos y de las nuevas sensaciones que nuestro bebé y nuestro cuerpo nos trasmite. Por eso necesitamos mucho apoyo.

 

También el hecho de que durante el embarazo haya algo “fuera de lo común”, aunque no revierta gravedad, nos puede causar ansiedad. Sobre todo cuando en vez de informarnos se nos mete miedo para hacer sin rechistar lo que el ginecólogo que nos toque estime oportuno. Nos merecemos que nos informen debidamente. La última decisión es siempre nuestra.

 

Sin embargo, también sucede que a pesar de no haber ninguna molestia evidente o diagnóstico preocupante, no vivimos el embarazo conscientes y felices. No nos gusta cómo cambia nuestro cuerpo, no aceptamos los cambios emocionales, no nos sentimos comprendidas, y/o nuestro miedo al parto nos atenaza. Todo esto podemos trabajarlo.

 

embarazo tercer trismestre

 

Normalmente las mujeres que llevamos bien los cambios, que nos vemos hermosas con nuestra barriga y que aceptamos nuestro vaivén emocional, disfrutamos plenamente de nuestro embarazo. Esto se traduce en muchos casos en un aumento de la libido, y en un mayor disfrute de esta etapa si cabe.

 

Mantener relaciones sexuales durante el embarazo es saludable tanto para nosotras como para nuestro bebé. Ambos nos beneficiamos del chute hormonal de placer. Sólo en caso de diagnóstico de peligro de aborto o parto prematuro se desaconsejaría no mantener relaciones durante el embarazo.

 

En ocasiones sucede que es la pareja quien es reacio a mantener relaciones sexuales. Sobre todo al final del embarazo por miedo a hacernos daño a nosotras o al bebé. Como en todas las situaciones de pareja, todo se puede solucionar hablando. Qué necesitamos, que nos gustaría por parte de nuestra pareja, y qué no hace sentir más cómodos.

 

Hay muchas formas de sentir placer. Se trata de encontrarlas, ya sea nosotras mismas o con nuestra pareja. Querernos, disfrutarnos. Un simple masaje o caricias pueden ayudarnos a relajarnos y a hacernos sentir de maravilla.

 

Lo que está claro es que todo lo que haga que nos sintamos mejor es beneficioso tanto para nosotras como para nuestro bebé. Por eso es necesario pedir lo que necesitamos, bien sea apoyo para sentirnos acompañadas, información contrastada para sentirnos seguras, o un abrazo o una mirada que nos reconecte con nosotras mismas.

 

¿Te apetece contarme cómo ha influido el embarazo en tu forma de verte y quererte? ¿Has notado algún cambio en tu libido?

 

 

Carolina Sánchez

 

Soñando Duendes

http://www.SoniandoDuendes.com

 

Restaurar la maternidad

Restaurar la maternidad

Hace unos días conversando con una mamá con su bebé al pecho, hablábamos de sus primeros inconvenientes de su lactancia y salió dentro de la conversación lo poco visible que es el amamantamiento en la sociedad, no vemos amamantar a mujeres en la calle y tampoco en nuestro entorno, y ella me dice: como algo tan natural en el ser humano, como lo es andar, conversar, sociabilizar, es tan poco visto, siendo que es la etapa más importante del ser humano, la base de nuestra  alimentación.

Desde esa reflexión es que podemos decir, que es cierto, la lactancia no es visible en la sociedad, pero no sólo la lactancia, sino que la misma maternidad, casi nuestro primer contacto con ella son nuestros propios hijos y llegamos a ellos sin experiencia, pero con mucha información de nuestro entorno, ya sea de familiares, servicios de salud, amigos, vecinos, televisión, medios de comunicación, etc. Llegamos a nuestra maternidad y/o paternidad, con muchas historias contadas, muchas vivencias externas, muchos mitos, mucho de todo, pero muy poco de lo que realmente queremos y sentimos, entonces es el momento donde llegan las dudas y los miedos.

Desde la concepción, gestación, pasando por el parto, la lactancia y hasta la crianza pasamos por distintas situaciones, y sobre todas estas etapas tenemos imágenes e historias ya pre-fabricadas en nuestra mente y muchos de estos escenarios, pueden ser mucho más sencillos de lo nos hacen creer.

 

maternidad

 

Pensemos en el parto,  nuestros cuerpos están preparados para parir a nuestros bebés, si dejamos que nuestros procesos fisiológicos fluyan como deben ser, podemos ver como nuestro cuerpo va cambiando y preparándose para parir, muchas veces en los sistemas de salud y la misma sociedad, ve a la mujer parturienta, como si estuviera padeciendo una enfermedad, se habla de síntomas de parto, se habla de pacientes, siendo que estamos pasando por un proceso natural, el parto es un proceso fisiológico dinámico, que pasa por varias fases, las cuales poseen distintas características, ritmos y tiempos los cuales pueden variar de mujer a mujer, de un parto a otro, es importante conocer estas etapas porque de esa forma la podremos transitar con mayor seguridad y tranquilidad.

Luego del parto, hay una fase critica, la transición la cual es muy importante para inicial la lactancia materna, el bebé recién nacido, posee el programa perfecto para activar a la madre y establecer el amamantamiento, es por ello que no debe existir separación, ese contacto entre la diada no debe ser interrumpido, sin embargo, apenas nacemos somos separados, tocados por otras manos, cargados por otros brazos, bañados, pinchados, medidos, pesados, y si tenemos suerte a la hora recién ya estamos de nuevo sobre nuestra madre, para el recién nacido lo más importante en ese momento es estar en su hábitat, sobre el cuerpo de su madre. Aquí un ejemplo de lo que puede hacer un bebé recién nacido, arrastrarse por si sólo hasta el pecho de su madre.

 

 

Si observamos y vamos conociendo estos procesos, nos vamos dando cuenta que todo puede ser mucho más sencillo, un mujer gestante saludable, puede parir sin problemas, sin complicaciones, pero debe haber un cambio, una restauración de la maternidad en todos sus ámbitos, podemos tener una lactancia exitosa, podemos no dejar llorar al bebé, podemos tomarlo en brazos las veces que queramos, todo el día si queremos, nuestro bebé lo necesita, nos necesita.

Hay tanto que des-aprender, un comportamiento tan natural como es el piel con piel, para bebés prematuros y nacidos a término, tenga que ser válido para el sistema de salud, sólo después de múltiples investigaciones, es porque algo pasa, es porque tenemos que recuperar, recuperar el paradigma original, como nos dice Nils Bergman.

Cuando tengas dudas, te invito a parar, respira y reflexionar sobre tu propio cuerpo, piensa como funciona, siéntelo, siente a tu bebé, en ti y en él puedes encontrar las respuestas.

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